He visto una entrevista que Camilo Egaña le hizo en CNN en Español a Luis Abinader, el nuevo presidente de República Dominicana. Hago el comentario tarde porque no veo televisión, ni siquiera tenemos cable en casa. Este tipo de contenidos me llegan a través de las redes sociales.
Me llama la atención que el equipo de comunicaciones de Abinader lo expusiera a Egaña (quien tiene una necesidad incontrolable de darle un toque de frivolidad a todo lo que hace). Por suerte para ellos, la audiencia de CNN en Español en Latinoamérica ya es comparable con la del canal de televisión de Isla de Pinos.
Egaña, que es incapaz de pronunciarse contra la dictadura de su país, no perdió ni un segundo para subestimar, denigrar y menospreciar a los dominicanos y a su país. Eso me hizo recordar a los amigos habaneros que no concebían que yo viniera a vivir a Santo Domingo.
No olvido a uno que me aseguró que esta ciudad era como “Guantánamo en colores”. Egaña trató a Abinader con el mismo prejuicio y con ese inexplicable complejo de superioridad con el que los cubanos van por el mundo. Mientras Cuba se ha convertido en un inviable país de zombies, República Dominicana es la economía que más crece en toda Latinoamérica.
Mientras Cuba está gobernada por militares corruptos, Luis Abinader fue elegido democráticamente en las urnas, después de una admirable movilización de la sociedad dominicana, que se manifestó libremente en las calles y en las redes, día a día, hasta lograr un cambio.
Hoy Santo Domingo es la capital económica del Caribe y una ciudad cada vez más cosmopolita. ¿La Habana? Tras 61 años de dictadura, se asemeja a un paisaje después de una batalla. Derrumbe a derrumbe, va camino a convertirse en Batabanó en blanco y negro.
3 comentarios:
De acuerdo absolutamente en eso de que Egaña no se resiste en darle a todo un toque de frivolidad. Pero eres injusto en no reconocer que ha sido totalmente exitosos en ese afan
Antes que Egaña, amigo Haroldo, Cala fue aún más exitoso, tanto, que acabó convirtiéndose en una versión guantanamera de Paulo Coelho. Ellos son, en conjunto, la mejor representación de la decadencia y caída de CNN. Un abrazo.
Y donde queda Carlos Alberto Montaner y en lo que se ha convertido?
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