14 septiembre 2008

Las lecciones de Junot

Junot Díaz, el escritor dominicano que acaba de ganar el premio Pulitzer con la novela La breve y maravillosa vida de Óscar Wao, dio varias lecciones en la excelente entrevista que Joan Prats le hizo en Estilos.
La primera, que los temas culturales no son exclusivos de esas publicaciones aburridísimas que nadie lee; sino que también pueden ser atractivos en espacios dedicados a un público mucho más amplio. Todo depende de la gracia y la inteligencia con las que se aborden. La segunda, sobre la bobería del nacionalismo.
Cuando Joan le pregunta por qué escogió a una traductora cubano-americana y no una domínico-americana, Junot explicó el proceso que se siguió, haciendo una prueba ciega entre varios traductores y la razón por la que se inclinó por Achy Obejas: "En vez de ser nacionalista, escogí a la mejor persona", dijo.
La tercera, sobre los lectores. La mayoría de los escritores que nadie lee se la pasan quejándose de que no los promueven y se inventan las más inusitadas e inútiles excusas para culpar a otros de su incapacidad. "Tenemos que cultivar lectores y la mejor manera es pasándole a una persona un libro que cambie su vida", propuso Junot.
Siguiendo su consejo, les recomiendo leer La breve y maravillosa vida de Óscar Wao. Mientras se escriban libros como ese, los lectores tendrán la necesidad de seguir existiendo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡Excelente comentario!!!

Anónimo dijo...

Muchacho, me estás poniendo sentimental con tus escritos, llenos de amor y la pasión de un profesional como tú.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Muy bueno esto.

Se trata de todo... dijo...

Esta es la mejor entrevista que le han hecho a Junot, a quien nunca le faltan respuestas inteligentes. Muy bueno el "post" positivo...

Anónimo dijo...

Fogonero querido,
Tengo exactamente esa misma impresión. No conozco ni la novela, ni al autor. Pero sí leí la entrevista, veladamente nacionalistoide -eso no augura nada bueno-, y las respuestas que al periodista no le quedó más remedio que publicar.
Como tú bien sabes, soy traductor, porque la vida me ha impuesto esa forma de ganarme la vida: dura, pero con compensaciones: cuando emnienda planas, simplemente; cuando redacta textos; cuando pone en su justa dimensión en otra lengua una idea brillante pero no pulida en su forma original en otro idoma. Todo eso han hecho traductores a lo largo de la historia y mucho le debe la "globalización" a la existencia de esta humilde, laboriosa y por lo general mal pagada ocupación.
Los hay, los ha habido -también es cierto-, que no han tenido a menos transliterar burdamente un texto, una carta, un documento, una obra señera, por un plato de lentejas.
Esto es tema para un debate, pero por lo pronto solo quiero llamar la atención.
Estoy buscando la novela de Junot en inglés: Quiero leerla en la versiòn original primero. Y si despues necesito acudir a la versión "dominicana", pues lo haré. Me interesa sobre todo la visión que tiene el autor del empleo del instrumento principal que tenemos los humanos, la lengua -como idioma, como medio fundamental de comunicación y de hacer arte. Y evidentemente, ese fue el ingés. En la entrevista de marras, que agradezco, entreveo una posición muy consecuente.
Joseph Conrad es uno de mis autores favoritos. Y a nadie se le ourre ya remitirlo a sus orígenes centroerupoeos cuando valoran sus obras.
También pienso que en este mundo, desde hace muchos siglos, las barreras nacionales en el plano del pesamiento, del acercamiento entre seres humanos tienen muy poso que contar. La globalixación no comensó en el siglo XX, sino muchos siglos atrás. Es consustancial con el ser humano, más evidente desde que decidió indentificarse con familias, grupos, tribus, naciones,idelogías (falsas o no ).
Te agradezco la provocación.
Ahora , te pido que coloques este comentartio en tu blog, porque "me quilla" el procedimiento.
Un abrazo,

Anónimo dijo...

Mi querido Camilo, muy bueno este comentario. Ya te he expresado que encontré esa novela simplemente alucinante.
Le envio copia de este correo a mi amigo Carlos Morfa que nos visita desde Alemania, y a quien coincidentalmente le hablé del libro que reseñas. Carlos estará mañana en la puesta en circulación del libro de Eduardo Zayas Bazán y quiere conocerte pues admira tus trabajos. Si tienes chance nos veremos allí.
Abrazos