En la más reciente edición de La Jiribilla, Laidi Fernández de Juan pone por escrito su desencanto con Fito Páez. Unos días antes, el autor de “Giros” hizo lo mismo con el suyo por la revolución cubana. Presumo que Laidi no tuvo acceso a la fuente primaria (es muy probable, todos conocemos las restricciones que hay en la Isla con la Internet), que es un reportaje de Arturo Arias-Polo.
Lo digo porque cita mal al cantautor y, al temer que el periodista de El Nuevo Herald haya sacado de contexto las palabras del argentino, es ella quien lo hace. Lo que en realidad hizo Fito fue criticar a la élite inamovible que ha gobernado a Cuba por medio siglo y exhortar a todos los cubanos a fundar la esperanza de un nuevo país.
“Nadie puede calentar la silla más de 40 años. Cualquier proceso revolucionario conlleva la idea revolucionaria: si se queda fijo es que ya se paró'”. Eso es lo que dijo Fito textualmente, Laidi, y me imagino que compartas con él esa creencia. Fernández de Juan hizo pública su tristeza porque Páez dijo que “lo que queda de la Revolución Cubana son muertos en el mar”.
No, Fito en realidad fue mucho más preciso: “No quiero ser tendencioso [porque] no hay buenos ni malos en ese sentido. Lo que hay son muertos en el mar, familias rotas e historias quebradas. El análisis político y las decisiones que se hayan tomado con respecto al manejo de la Isla se me escapan de las manos [...]. No tengo derecho histórico. No puedo, porque no soy de allí'”.
Todo eso, Laidi, también es una verdad irrefutable y una señal de que Fito tiene intacta la voluntad de seguir ofreciéndole su corazón a los cubanos con la misma autenticidad y honestidad que lo hizo el primer día. Es cierto lo que afirmas, Silvio Rodríguez dijo una vez que la revolución es un sistema perfectible. Pero en todos sus años como diputado no logró, por ejemplo, que se aboliera el Permiso de Salida, que es una aberrante violación de los derechos de todos nostros, incluyéndote a ti y a tus hijos.
“Yo creo que ahí hay que fundar la esperanza de una nueva Cuba. Ese puede ser el secreto, porque no se puede vivir con odio y resentimiento toda la vida”, fue lo que en verdad dijo Fito en ese momento y te lo repito yo, Laidi, ahora. Cuando se defienden tantas verdades a medias, puede correrse el riesgo de acabar mintiendo sin ni siquiera quererlo.
Lo digo porque cita mal al cantautor y, al temer que el periodista de El Nuevo Herald haya sacado de contexto las palabras del argentino, es ella quien lo hace. Lo que en realidad hizo Fito fue criticar a la élite inamovible que ha gobernado a Cuba por medio siglo y exhortar a todos los cubanos a fundar la esperanza de un nuevo país.
“Nadie puede calentar la silla más de 40 años. Cualquier proceso revolucionario conlleva la idea revolucionaria: si se queda fijo es que ya se paró'”. Eso es lo que dijo Fito textualmente, Laidi, y me imagino que compartas con él esa creencia. Fernández de Juan hizo pública su tristeza porque Páez dijo que “lo que queda de la Revolución Cubana son muertos en el mar”.
No, Fito en realidad fue mucho más preciso: “No quiero ser tendencioso [porque] no hay buenos ni malos en ese sentido. Lo que hay son muertos en el mar, familias rotas e historias quebradas. El análisis político y las decisiones que se hayan tomado con respecto al manejo de la Isla se me escapan de las manos [...]. No tengo derecho histórico. No puedo, porque no soy de allí'”.
Todo eso, Laidi, también es una verdad irrefutable y una señal de que Fito tiene intacta la voluntad de seguir ofreciéndole su corazón a los cubanos con la misma autenticidad y honestidad que lo hizo el primer día. Es cierto lo que afirmas, Silvio Rodríguez dijo una vez que la revolución es un sistema perfectible. Pero en todos sus años como diputado no logró, por ejemplo, que se aboliera el Permiso de Salida, que es una aberrante violación de los derechos de todos nostros, incluyéndote a ti y a tus hijos.
“Yo creo que ahí hay que fundar la esperanza de una nueva Cuba. Ese puede ser el secreto, porque no se puede vivir con odio y resentimiento toda la vida”, fue lo que en verdad dijo Fito en ese momento y te lo repito yo, Laidi, ahora. Cuando se defienden tantas verdades a medias, puede correrse el riesgo de acabar mintiendo sin ni siquiera quererlo.
Texto de Laidi Fernández de Juan en La Jiribilla: http://www.lajiribilla.cu/2008/n381_08/381_10.html
5 comentarios:
Me gusta Camilo, que comienzes a tener estos razonamientos. Sin odios tendenciosos. Fito no es de allí y con qué claridad lo puede ver todo. Es interantísimo lo que dices de hacer referencias a textos no leídos o tergiversados, esa fue nuestra verdad, crecer bajo la interpretación de otros. El pobre Silvio, se perdió como artista en sus finales (que han sido demasiado largos) y en sus principios como diputado. Por eso "zapatero a sus zapatos". Creo que hace mucho tiempo esperaba de tí algo como esto.
¡Cojones, mi hermano, como te quiero! Yo hablo por tu boca.
Gracias, Camilo, por decir lo que muchos aquí adentro no podemos. Es simpático, ahora prohibirán a Fito Páez caerá en el mismo saco que Roberto Carlos, Julio Iglesia y José Feliciano. Quién se lo diría, ¿no?
Anda... candela al jarro!
Hasta que suelte el fondo...
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