19 noviembre 2006

Identidades

Casi nadie es como los demás lo pintan. Por lo regular, no hay nada que se aleje más de un individuo que esa idea preconcebida que nos hacemos de él. Las identidades no son algo que se puedan definir con al precisión matemática de los solsticios o los eclipses. Las identidades se van conformando a través de las vivencias comunes y corrientes, esas que luego, con el paso de los siglos, empieza a llamarse tradición, historia, cultura...
Tratar de descifrar a uno, a cien, a miles o a millones de individuos a través de una identidad determinada, puede ser tan erróneo como ignorar esas señales casi indescifrables que siempre nos distinguen del resto. Recuerdo una larga conversación que tuve con Silvio Torres Saillant sobre eso. “El hecho de que ahora me guste más el Shiraz australiano que el mabí seibano, no quiere decir que esté dejando de ser yo. Todo lo contrario. Cada nueva experiencia me reafirma más como lo que soy”, dijo Silvio con su peculiar manera de enfatizar.
No a todos los dominicanos les gusta el mangú, ni todos los cubanos saben bailar, ni todos los franceses son petulantes, ni todos los ingleses tiene un fino sentido del humor, ni todos los argentinos son egocéntricos, ni todos los irlandeses beben cerveza, ni todos los turcos son negociantes. En cambio tú eres demasiado fiel a lo que me imaginé el primer día, por eso insisto en permanecer a tu lado.

1 comentario:

The ArtHistorianMom dijo...

Siempre sera una sorpresa. Alguien quien en persona habla tan poco puede escribir tanto y tan bien. Me imagino que a la persona a quien tenias en mente cuando escribiste esto se debio de sentir muy alagada y muy cerca de ti. leyendo tus blogs y columnas te conozco de verdad, algo que nunca logre en persona despues de tiempo de trabajar juntos. congratulations on finding home again.