No es que quiera restarle mérito al colombiano, alguno tendrá cuando ha logrado tanto éxito en todo el continente. Lo que me pasa con él es que había podido ignorarlo hasta que se le ocurrió cantarle a la paz en uno de los lugares del hemisferio donde más se ha hablado de guerra: la Plaza de la Revolución de La Habana.
Debo aclarar que no estoy en contra de que lo haga, ni siquiera a sabiendas de que ese acto será utilizado por el régimen cubano y sus corifeos. Sigo pensando que todo eso no es más que júbilo hervido con trapo y lentejuelas. Pero el inefable Juanes acaba de dar unas declaraciones en El País que no puedo pasar por alto.
“Miami y Cuba son dos hermanos que se detestan profundamente”, dice el autor de “La vida es un ratico”. Cuando habla, Juanes es todavía más elemental que cuando canta. Por eso confunde al pueblo de Cuba con la dictadura que lo ha sumido en la miseria y al exilio de Miami con la caricatura que esa propia dictadura ha urdido.
El pueblo cubano sigue siendo uno solo, Juanes, a pesar de que 50 años de criminal represión trataran de dividirlo en dos bandos irreconciliables. La inmensa mayoría de los que irán a escuchar tus canciones en la Plaza de la Revolución, sobreviven por las remesas que les envían desde el exilio sus hermanos, primos o tíos. El odio no es entre la gente sino contra los que te han permitido cantar.
Celia Cruz se murió sin poder volver a su patria; los mismos que ahora te han dado el visto bueno a ti, le negaron ese derecho a ella. Hace apenas unos meses, Willy Chirino pidió permiso para que uno de sus conciertos en Miami se proyectara en una pantalla gigante en La Habana, ni siquiera se molestaron en responderle. Ninguno de los artistas que promueven ahora tu concierto, hicieron nada por propiciar un acercamiento con su compatriota.
No es un problema de odio, muchacho, es de intolerancia. Para resumirlo con una de tus versos más simplones: “Si tu me pagas con eso, yo ya no te doy más de esto, amor”.
7 comentarios:
Silvio, un fantasma de sí mismo, un hombre al servicio de la Nomenclatura Cubana Millonaria (NCM)...Juanes , cuídese compadre
Camilo, (te llamo por tu primer nombre porque somos de la cosecha del 67' y solo te llevo unos pocos dias...) no has podido decirlo mejor..
Gracias por este blog que recien descubro. Saludos desde Miami.
Niurki
Excelente Venegas has dado en el clavo una vez más. te felicito por este blog tan bien ilustrado y escrito con tanto ingenio.
Hermanos, el falso video de la "mujer" de Pánfilo (http://www.youtube.com/watch?v=DZanMeui_Iw), sigue colgado en youtube. Una supuesta "guajira" que dice "vídio" en lugar de "vídeo" está en un montaje inescrupuloso para ganar visitas al canal. Los comentarios críticos a semejante impostación son borrados y bloqueados los usuarios que insisten. Afirma que el vídeo se lo mandaron de Cuba y que la que habla con acento raro es guajira, ignorando que Pánfilo no tenía mujer y que vivía sólo con su madre. Una farsa como esta sólo puede servir al gobierno de Cuba para tildar de mentirosos a los exiliados. No permitamos que semejante embuste continúe, escribiendo más comentarios en el vídeo, o en la bandeja del canal de esta inescrupulosa cubaniita1000x100to.
Saludos y que la verdad emerja por sí sola.
Ni una palabra más, Camilo, has dicho todo lo que hay que decir. Sobre todo lo de Celia y Willy Chirino. No entiendo el entusiasmo de Silvio y la algarabia de Amaury con un colombiano. ¿Por qué no tuvieron los cojoncitos de hacer lo mismo por sus compatriotas que, dicho sea de paso, tienen mucho más calidad como artistas que Juanes?
Recordado Camilo:
Quise dejar mi comentario en tu blog, pero le tienes activado la condición de que hay que verificarlo mediante poner un número que sale en pantalla y que en los casos de los ciegos, la teoría dice que hay un enlace que lo dirá en voz, pero ya sabes, la teoría es una cosa y la práctica es otra. Intenté varias veces que el enlace me dijese el número, pero nada de nada, así que te escribo por aquí. Nada, brother, era para agradecerte que me catalogases de entrañable en uno de tus últimos posts. Tanto el Blado como yo somos lectores de tus comentarios y después, como supondrás, son motivos de conversas, acompañadas en muchos casos por algo de ron.
En fin, hermano, que te leemos y recordamos.
Un abrazo para ti, extensivo a Zilma, Joaco.
Joaquin eres inmenso
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