La tercera, de izquierda a derecha, es Barbarita, la madre
del Chiqui. Hija y nieta de canarios. Nunca encontró la palabra precisa para
regañarnos, por eso prefirió siempre los chuchos de guácima. Cada vez que nos
sorprendía jugando en la línea del tren, nos perseguía hasta lograr su
objetivo.
El tercero, de derecha a izquierda, es Berto, el padre del
Chiqui. No he conocido a tantos hombres honestos en 44 años de vida. Entre
ellos, pocos son más humildes que él. Todos los recuerdos suyos que tengo son
en dos direcciones: o camino del trabajo, o de regreso del trabajo.
La segunda, de izquierda a derecha, es Xiomara, la hermana
del Chiqui. Siempre la vi como la más pequeña de todos nosotros. Hasta ese día
en que nos hicimos la foto y supe que había decidido regresar. Allá en Canarias, la
tierra de sus ancestros, nunca encontró un lugar que fuera tan suyo como el
Paradero de Camarones.
El segundo, de derecha a izquierda, soy yo, el vecino de los
Aguiar Melián. Ahora que los miro de frente, reconozco en sus rostros ciertos signos
más que me son vitales. Las novelas románticas y los refranes más pragmáticos siempre
hablan de los vínculos de sangre. De esta gente no soy ni ariente ni pariente. Pocas cosas, en cambio, me son tan familiares como sus rostros.
5 comentarios:
Camilo yo tambien fui al Paradero y todo el mundo te recuerda con mucho cariño y saludos especiales de Juana Granado.
Lindos recuerdos,personas maravillosas ,ellos son tambien parte de mi historia.Para ti mis grandes saludos.
Camilito,muchas gracias por la foto y por lo que escribes de mi familia, ellos son especiales, me has hecho llorar al amanecer, porque es lo primero que hago al levantarme, ver que tienes de nuevo en tu blog, muchas gracias por todo.
VAS A ACABAR CONMIGO... TANTA NOSTALGIA, TANTO AMOR... SIEMPRE HE ESTADO ORGULLOSO DE TU BONDAD Y TU NOBLEZA.
TE ABRAZO
grasias mi hermano pero tu sabes que esa es tu familia tambien
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