En una de las primeras escenas de Scarface, Toni Montana es albergado en sitio donde han recluido a
todos sus compañeros de viaje. Estamos hablando de 1980 y de la crisis del
Mariel, donde miles de cubanos abandonaron su país y la ideología que regía
(rige) en él.
Hay un momento de la película en que Brian De Palma ofrece una vista aérea
del campamento. Bajo la tela de viaductos, cientos de casas de campañas sirven
de refugio a los exiliados. Actualmente, toda la ciudad de Miami presenta un panorama
similar al que vivió el celebérrimo Montana a su llegada.
Una prueba de ello son las
columnas de las casas. No importa que sean dóricas, jónicas o corintias, al
final no son más que una tubería de aluminio disfrazada de sheerock. Todo en la
ciudad es provisional, como si los que la viven supieran que nada allí va a
durar lo suficiente.
Mientras preparamos el viaje de
regreso a Miami, le recordé a Diana una anécdota que vivimos juntos allí. “Es
que eso no es una ciudad –me dijo–, es un campamento”. No pude resistirme a la
tentación de llamar a Alejandro Aguilar para comentarle la frase.
Entonces él acabó de redondear
la idea.
–Miami no es un lugar sino una
sala de espera –aseguró tajante.
Pronto estaremos compartiendo
otra vez con esos individuos que solo se comunican en su idioma y que insisten
en repetir nombres muy difíciles de pronunciar en inglés: Palma Soriano,
Yaguajay, Cumanayagua, Güira de Macurijes, Guanajay…
5 comentarios:
wow, miami como purgatorio o limbo me gusta esa idea!
Soy muy mediocre por estar demasiado atenta a tu blog, esperando los bochinches entre los seguidores que te odian, te aman y se matan entre ellos, de vez en cuando??????
Tu despiertas pasiones peligrosas! Santo Dios!
Muah! Te quiero siempre!
GENIAL!!!! CAMILITO, NUNCA SE ME HABIA OCURRIDO ESO DE MIAMI COMO ESCUELA AL CAMPO. ES CIERTO!!!!
Querido Camilo, sabes que no solo soy tu amiga, soy además ferviente lectora de tus poemas y disfruto muchísimo leyendo El Fogonero, sin embargo hoy al leer tu artículo “El campamento: la ciudad donde los cubanos esperan” algo me ha sabido amargo. Y es que discrepo de tu enfoque. Creo que es un artículo escrito con visión de túnel. He vivido en Miami solo unos meses, después de 7 años de vivir muy al Norte de los Estados Unidos, donde no hay casi cubanos. Te comento mi punto de vista, si bien no se puede decir que esta sea una de las ciudades más lindas del mundo, Miami es hoy hogar de muchos cubanos y para mi el lugar donde la hispanidad gana su máxima expresión. Miami es amalgama, ajiaco si lo prefieres más a lo cubano, calidez, conflicto, discrepancia y amor. Miami te abre las puertas, por ser cubana o colombiana o amiga de una amiga. Si bien hay muchos cubanos que esperan, también hay muchos otros que se integran: campamento o sala de espera para algunos, hogar, trabajo y futuro para otros. Y cercanía. Mi querido amigo, con todo el cariño que te tengo te digo: tienes una visión polarizada de Miami. Ojala en tu próximo viaje descubras lo que yo he descubierto.
Ningun error hay en tus palabras.
Estos "ultradefensores" de Miami, se parecen a los "ultracatólicos" de USA cuando casi crucifican a John Lennon y quemaron los discos de los Beatles en agosto del 1966, en piras organizadas por el Ku Klux KLan, si eso mismo KKK, por decir Lennon que "ellos serían tan famosos que Jesuscristo", en una entrevista a una periodista inglesa.
La entrevista en cuestion fue publicada en Inglaterra y su frase pasó inadvertida. Esa misma entrevista fue publicada 4 meses más tarde en USA, 15 días antes de la gira que iban a hacer los Beatles en USA, y fue el armagedon que se formó contra los Beatles y Lennon especificamente.
Ahora tu palabra "campamento" ha levantado la "ira" de unos cuantos que no resisten el humor y la sátira.
Miami bien que es un campamento moral.
¿No hay allí acaso el remedo de San Nicolás del Peladero, con sus politicos y poliquerías, corrupción crimen y drogas?
Por favor, no tienen sentido del humor...
Angel Más
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