19 diciembre 2014

Mi tío el desempleado

Aldo Yero Mosteiro nació en el Paradero de Camarones en 1941. Era hijo de Tomás Aurelio Yero Alonso, jefe de estación, y Atlántida Mosteiro Góngora, una hermosa gallega que le sirvió de modelo a Pablo Donato (el arquitecto más famoso de Cienfuegos) para la escultura de un ángel.
Aldito tenía 17 años la noche que fue a un baile del Liceo y no volvió a casa. Junto a un grupo de amigos se robaron las armas del cuartel de San Fernando y se alzaron en el Escambray. Participó en la toma de Güinia de Miranda, a las órdenes del Che Guevara.
Mi abuela, que había nacido en el Escambray y conocía ese lomerío como la palma de su mano, subió a buscarlo. Ella y mi madre caminaron decenas de kilómetros hasta que dieron con él en un campamento de la retaguardia. Tenía los pies destrozados y una caja de historietas del Llanero Solitario.
Comenzó a practicar para hacerse ferroviario, como su padre. Un día debía tomar el tren hacia Sagua la Grande, para relevar a un operador, pero decidió alzarse otra vez en el Escambray. Esta vez, contra la Revolución. Mi abuela fue por él y, con el olfato de una loba, encontró a su cachorro. Se lo llevó de regreso a casa y ese fue, hasta hoy, el secreto mejor guardado de mi familia.
Con los años se convirtió en el mejor Despachador de Trenes de la División Centro de los Ferrocarriles de Cuba. Un día de zafra, que estaba de vacaciones en Camarones, totalmente borracho, tomó el teléfono y deshizo un nudo donde estaban implicados tres trenes de carga, uno de caña y dos de viajeros.
No olvido los saludos de los ferroviarios al pasar por el andén de Camarones. ¡Aldooooo!, le gritaban orgullosos, tratando de que el eco de sus voces también corriera por su cuenta. A principios de los años 90 se integró a un grupo que trató de defender los Derechos Humanos en Cuba. Lo expulsaron del Ferrocarril sin derecho a laborar en ninguna otra empresa.
Desde entonces fue mi tío el desempleado. En su casa, con la cabeza recostada en un sillón, seguía dirigiendo el movimiento de los trenes con solo escucharlos. “Ahí va el viajero de Morón —decía después de oír un pitazo—, lleva media hora de retraso”. Aunque su sentido del humor era capaz de sacarle una carcajada al hombre más triste, nunca más fue feliz.
De niño, yo quería ser como él. Nada me gustaba más que oír a los ferroviarios contar las hazañas de Aldo Yero. Nadie como él lograba que los trenes circularan en hora y se cruzaran en el punto exacto, de manera que ninguno de los dos perdiera el itinerario.
Murió a unos pasos de la línea de ferrocarril. Desde hace dos días los trenes pasan por Santa Clara sin que él dirija sus movimientos con solo escucharlos. Su sillón está vacío.

10 comentarios:

salva33125 dijo...

ALDO tiene en estas líneas el mejor de los homenajes, ese que sale del amor filial..allí donde esté seguirá escuchando pasar los trenes cargados de sueños por un país igual para todos.

Francisca Lafont dijo...

Hay Camilito nos has echo llorar a Enrique y a mi con lo que has contado sobre Aldo, ese gran amigo compañero, gran hijo hermano y tio una persona que le corria por las venas los Ferrocarriles y aún después de muerto los ferroviarios lo seguirán recordando y contando sus historias sobre su hermoso trabajo en las vías ferroviarias QEPD nuestro inolvidable Aldo Yero Mosteiro. Dale nuestros saludos a Lérida y hazlo extensivo a tu familia.

William Cobas dijo...

siento mucho tu perdida que en paz descanse ese maestro de los ferrocarriles

Mario Jacas Medina dijo...

El Fogonero es el blog que mas lagrimas me ha sacado y no solo por este post, por muchos otros, la nostalgia me invade cada vez que regreso, y me gusta, me regresa a mi niñez, que por cierto nunca fue cerca de un ferrocarril.

Ivette Villazan Boris dijo...

Camilo, que soy muy llorona, no me jodas coño!

Denis Perez dijo...

Que bonito homenaje Dios! No conozco a Camilo en persona, pero mi hijo y yo lo leemos desde hace mucho y os lo juro, es el blog de Cuba más entrañable que he leído. Además tiene seguidores de 9 y 11 años- amantes de los trenes y de Cuba. (Mis chavales ) un abrazo desde Madrid para tu bonita familia y para Camarones.

Pedro Silva dijo...

Camilo, nos ha robado el corazon

Alejandra Alvarez del Sol dijo...

Camilo lo siento muchísimo por tu madre y por tí. Los abrazos y besos que tenías pendientes para él atesoralos en tu corazón y tu mente. Fuerza amigo.

Anónimo dijo...

ESTE PEQUEÑO POST ESTA A LA ALTURA DE "CONDENADOS DEL CONDADO", ES UNA OBRA MAESTRA DEL CUENTO CUBANO. APRETASTE SELENA!!!

Unknown dijo...

Mi abuelo Aldo, la única persona que me hacía cuentos para dormir...cada vacaciones durante 20 años le pedí que me contará la historia del " gallo que se quería limpiar el pico para ir a la boda de su tío Perico" él jamás olvidaba ni una palabra y yo aún lo escuchaba como si fuese la 1era vez. Recuerdo los malos hábitos que me inculcó, desde llevarme el desayuno a la cama y dejarme seguir durmiendo hasta el llevarme al baño en sus pies como si fuesen mis chancletas. Siempre me dijo que no debía temerle a las ranas(aunque en realidad nunca he dejado de hacerlo) Que tenía que besar los pellejitos de abuela Beba y que nunca me olvidase de poner el pestillo cuando llegase de fiesta. Se fue pero aquí se quedan nuestros recuerdos, nuestras noches de cine, la primera mentirita que le dije por llegar a las 7am a casa ( la cual hizo que la creyó) y yo me sentía una mentirosa poderosa " ohhhh abuelo se lo ha creído, que ingeniosa soy" sus resabios, su siesta de las tardes, su manía de comprarme aguacates para las cenas, su tos de los años de cigarro, su deseo de siempre complacerme e ir a donde sea con su camisa de cuadros a por mi guarapo...yo siempre seré su lagartija, aunque engorde 100kilos y yo siempre lo veré cuando escuche el sonido de las fichas del dominó, otra de sus adicciones aparte de la de hacernos feliz..." R con R cigarro, R con R barril, Rápido corren los carros por la línea del FERROCARRIL "
La casa no será lo mismo sin tu bigote :( TQ